UN DÍA CON RAMLA ALI

Batiendo récords y rompiendo estereotipos, Ramla fue la primera boxeadora en representar a Somalia en los Juegos Olímpicos. Con la vista puesta en un título mundial este año, aprovecha su perfil público para dedicarse a su pasión filantrópica, realizando extraordinarias contribuciones para mejorar la vida de las mujeres pertenecientes a minorías étnicas y religiosas, así como la de las víctimas de la violencia de género.

 Nacida en Mogadiscio (Somalia), Ramla llegó a Reino Unido como refugiada a los doce años. Su camino hasta convertirse en boxeadora profesional fue extremadamente difícil. En el colegio la acosaban por su sobrepeso, lo que la llevó a descubrir los beneficios del boxeo y el muay thai. La disciplina y la pasión por el deporte transformaron todos los aspectos de su vida a medida que su carrera avanzaba. 

 «Perseveré por obstinación, en realidad. Después de haber invertido tanto tiempo, energía y recursos en el deporte, necesitaba ver el resultado de lo que había invertido y me negué a abandonar hasta conseguir lo que me había propuesto».

Fuera de temporada, tiene más tiempo para otras actividades, como su trabajo sin ánimo de lucro, una próxima película sobre su inspiradora historia y su carrera como modelo. Para pasar la mañana en movimiento, elige un conjunto de nailon técnico, monocromático en negro, de la nueva colección Moncler.

«Lo que más me llamó la atención fue el diseño de las diferentes prendas de la colección. Creo que cuando la gente piensa en Moncler, lo que le viene a la mente son las cazadoras acolchadas, pero lo que me ha encantado de esta colección es el diseño de las zapatillas, los looks veraniegos más informales».

«Aunque soy de Londres, me encanta el ritmo de Brighton. Da la sensación de que hay menos prisas. También me encanta el aire limpio, el espacio y las puestas de sol de aquí».